Añez se pronunció enérgicamente sobre la intención del terrorista Álvaro García Linera en la historia reciente de Bolivia, señalándolo como autor de múltiples atropellos contra la democracia y la estabilidad del Bolivia.
Rememoró que García Linera, exvicepresidente y exintegrante del Ejército Guerrillero Tupak Katari, participó en asaltos armados que desviaron recursos destinados a la población trabajadora, generando violencia y caos.
Añadió que es «Autor de tropelías como antisocial y tesorero del Ejército Guerrillero Tupak Katari, que asaltaron las remesas para los pagos a los mineros, las remesas de COBEE y la casa del señor Walter Gumucio, robos a mano armada de miles de dólares destinados a generar violencia, muerte y dolor en Bolivia».
Además, sostuvo que es cómplice de Evo Morales en actos de corrupción, incluyendo la denominada “nacionalización” de empresas extranjeras, cuyo costo en demandas internacionales terminó perjudicando económicamente al Estado boliviano.
Además le responsabilizó por el desconocimiento de los resultados del referéndum que prohibía otra reelección y las irregularidades en las elecciones de 2019.
El exvicepresidente participó en una conferencia sobre ‘Estado, lo ideal y lo material de la política’, donde hizo referencia al conflicto de divisas que atraviesa Bolivia. En su intervención, García Linera sugirió que el Estado debería «agarrar del cuello» a los exportadores para forzarlos a entregar sus dólares.
El discurso del exvicepresidente ha generado indignación en diversos sectores, que ven en estas afirmaciones un intento de justificar políticas de presión y control sobre quienes generan empleo y contribuyen al desarrollo económico del país.